Luís Montejo
Luís Montejo nació en una pqueña villa , perteneciente al
partido comarcal de Bribiesca ,
provincia de Burgos. . Con tan solo 14 años ya ejercía en Miranda de Ebro, el
oficio de aprendiz de herrador. Con la profesión bien aprendida, ocuparía en Nájera,
una década después la plaza de herrador
principal, que ejerció durante mas de cincuenta años. Murió muy anciano, creo
que Luís, rebasó la edad de 82 años. Se caso en nuestra ciudad con doña Pilar
Morras, y fueron padres de 6 hijos. La mas pequeña Pilar . Los otros varones.
Por cercanía de de la plaza del herradero, con mi casa
solariega, tuve la oportuna curiosidad infantil de ver cientos de veces faena a
Luís en su maestría de herrar las caballerías. Me apasionaba su increíble
habilidad en hacerlo y como dominaba, a aquellos animales remisos a someterse a
la operación de ser calzadas sus pezuñas con nuevas herraduras. Recuerdo que
vestía un tosco delantal de cuero y un ancho cinto del mismo material, sobre el
que colgaban enfundadas las elementales herramientas. Un martillo, unas
afiladas tenazas y una recia cuchilla de diseño vertical para rebañar los
cascos de los semovientes. CREO QUE SE LLAMABA BRACOBANTE O ALGO PARECIDO. TAMBIEN USABA EL ACIER, UNA ESPECIE DE MORDAZA, CON DOS BARAS ARTICULADAS EN DISEÑO DE COMPAS, ARTICULADAS CON UN CORDEL PARA APRETAR LOS HOCICOS DE LA CABALLERIA...lUIS NO USABA EL FAMOSO POTRO DE ERRAR. SU DOMNIO ERA MAGISTRAL EN LA FAENA .....
Un herraje completo de las cuatro pezuñas, le costaba a Luís
hacerlo, no mas tiempo que el que emplea un peluquero en arreglarte la melena,
eran increíbles su celeridad y
perfección. Terminada la faena el animal, hacia sonar ruidosamente su nuevo
calzado contra el empedrado de la Plaza.
Poco después el que guarda turno lo sometían, al mismo
proceso, tras la elección de los módulos de herraduras, justas en tamaño, que
fabricaban en en taller de la arrabal los hermanos Mayoral ´.
Promete abundar en la apasionante proyección humana de este
personaje, sabio en su oficio de curara animales de tiro y carga, con una aportación
veterinaria excepcional. Descendia a la cura de los animales con tecnicas que dominaba a la perfección, curandolos e incluso con intervenciones quirurgicas de urgencia. Tenia y cuidaba de unos perros de raza bellísimos. Era
cazador de perdices, con mas pasión , que provecho de capturas. Amigo personal
de mi padre y cómplice d aventuras cinegénicas. Al fin una persona , de
excepcional humanidad y competentecia profesional de insólita factura. Muy cercano a sus labores operaba Tjburcio como esquilador creo que eran amigos....
Siendo muy mayor le pedi como recuerdo su viejo martillo de
herrar aballerias, me concedio el favor, y guerdo la herramienta como un
tesoro. . Mi gratitud a su hijo Adolfo por facilitarme datos de su buen padre
LUIS MONTEJO. Apellido originario de EXTREMADURA ctado con el importante
movimiento de La Mesta
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